En esta primera parte revisaremos las causas de estas variaciones. En la segunda se plantearan alternativas para equilibrar el nitrógeno en el agua de una piscina.

El nitrógeno en la naturaleza y los seres vivos

El nitrógeno se presenta como gas inerte (N2), cuyos átomos se unen por un fuerte triple enlace. Este enlace impide su uso directo por la mayoría de los organismos y primero debe ser convertido en amonio (NH4) o en nitrato (NO3). Bacterias específicas, como el Rhizobium trifolium lo convierten en estado biológicamente útil, como el nitrato de sodio (NaNO3) y el nitrato de potasio (KNO3). En los seres vivos el nitrógeno se encuentra formando los aminoácidos de las proteínas, los ácidos nucleicos (ADN y ARN), en la transferencia de energía del ATP y en otros compuestos orgánicos. Pero el nitrógeno también interviene en compuestos inorgánicos como el ácido nítrico (HNO3), el amoniaco (NH3), óxidos (NO, NO2, N2O4, N2O) y cianuros (CN-).

Los aportes antropogénicos

Como consecuencia de los aportes antropogénicos, el ciclo global del nitrógeno ha sido alterado significativamente desde el siglo pasado. Dentro de estos aportes están el nitrógeno que llega a los pozos sépticos, como parte de los desechos orgánicos, en los desperdicios de comida y en los productos de limpieza. El nitrógeno sale como amonio en los lixiviados de los numerosos pozos sépticos de las poblaciones. Algo de este amonio es adsorbido por las partículas del suelo y es inmovilizado para su posterior transporte.

Otra entrada al ambiente se da a través de la agricultura y la industria. Los fertilizantes inorgánicos que se aplican a los cultivos resultan en escurrimientos del nitrógeno soluble hacia los ríos, estuarios y océanos. Aunque generalmente se dirige mayor atención al efecto de los nitratos en las aguas subterráneas; sin embargo, estos nitratos también pueden llegar a las aguas superficiales de ríos, estuarios y estanques por otras vías, como las precipitaciones y los estiércoles. También están los nitratos que se escapan en los lixiviados de las lagunas abiertas de oxidación, que fluyen a los estuarios.

Conclusión

Las entradas de nitrógeno están excediendo a las aportaciones que se dan por fijación natural, lo que determina incrementos de concentracion en los diferentes canales por donde se distribuye y generando deterioros ambientales, como la eutrofización de las aguas superficiales, la proliferación de algas tóxicas, la hipoxia, la lluvia ácida, la saturación de nitrógeno en los bosques y el calentamiento global.

Está claro que la naturaleza por una parte y las acciones antropogénicas por otra, generan las variaciones y sobrecargas de nitrato en los ambientes terrestres y acuáticos de las distintas regiones costeras. El desarrollo de la acuicultura también genera cargas de nitrógeno al medio, porque la alimentación de peces y camarones inevitablemente crea residuos ricos en nitrógeno, fósforo y minerales, que son nutrientes para el agua de ríos y estuarios. En las aguas más abiertas el efecto de todas las descargas es menor, comparado con estuarios estrechos o de poca renovación.