[Charla] La alimentación representa el mayor costo en la producción de camarón (± 50%), por eso el protocolo que se use es importante para disminuirlo. La forma común de alimentar camarones ha sido bajo el método conocido como Standard Feeding Protocol (SFP, por sus siglas en inglés), que se hace manualmente y se lo conoce como “voleo”. Ahora se empezó a utilizar alimentadores automáticos con multi-racionamiento de las dosis.
En el experimento “Alimentación de camarones en relación a la actividad enzimática como una respuesta natural al ritmo circadiano y ciclo de muda” (C. Molina, E. Cadena y F. Orellana. 2000), los investigadores partieron de que el cálculo para alimentar, basado en tablas, no considera los hábitos naturales de alimentación del camarón, ni tampoco sus ciclos de muda. En este experimento se evalúa el efecto que las fases lunares tienen en el ritmo circadiano y el ciclo de muda; es decir, sobre la actividad enzimática y su relación con el crecimiento y conversión alimenticia.
En esta charla técnica se hace hincapié sobre las ventajas de alimentar el camarón considerando las fases lunares, el ciclo de muda y los picos de máxima actividad enzimática, con lo que se lograría un mayor aprovechamiento del alimento. Estas consideraciones permiten optimizar el uso del balanceado, ahorrar dinero en alimentación, aminorar los desperdicios de balanceado y tener un mayor cuidado del suelo de las piscinas. Aquí también se consideran los aportes que el uso de los platos testigos da para perfeccionar el protocolo, cálculo de alimentación diaria y suministro del balanceado en multi raciones/24 horas.
Lugar: Viera Cruz
Conferencista: Henry Álvarez