En los países desarrollados tiene efecto una desenfrenada carrera que permita demostrar científicamente la efectividad farmacológica e inocuidad de nuevos medicamentos naturales, para incorporarlos al arsenal de las transnacionales farmacéuticas. En los últimos años se ha relacionado el rol de las Especies Reactivas de Oxígeno (EROs) en la patología de diversas enfermedades del camarón. Entre los productos antioxidantes se destacan los vegetales, los carotenos y la vitamina E. La búsqueda de nuevas sustancias con propiedades medicinales es uno de los objetivos fundamentales de las grandes empresas que investigan medicamentos.
Un grupo de científicos cubanos dirigidos por la doctora Luz María Sánchez, pertenecientes al Centro Nacional de Sanidad Agropecuaria, presentaron las bases fármaco-toxicológicas que sustentan el desarrollo de productos farmacéuticos a partir de la especie vegetal Rhizophora mangle L (mangle rojo). Los investigadores sustentan la eficacia e inocuidad del extracto acuoso de su corteza como antiséptico, acelerador del proceso de curación de heridas, antioxidante, antiinflamatorio y anti-ulcerogénico. Demostraron que dicho producto presentó un efecto antiséptico frente a un amplio espectro de microorganismos que constituyen fuentes de infección en las heridas, y establecieron la acción positiva sobre el proceso de curación de cortes quirúrgicos. A partir de los resultados obtenidos para este extracto, fueron reportadas propiedades antioxidantes y antiinflamatorias y se demostró la eficacia en el tratamiento de heridas y quemaduras.
Se citó la actividad antiulcerogénica del mangle rojo mediante diversos mecanismos de acción: citoprotector, antisecretor, disminución de la depleción de prostaglandina PGE2 (de importancia en el mecanismo defensivo del estómago) y, antibacteriano frente a Helicobacter pylori, lo que lo hace superior respecto a medicamentos genéricos actualmente en el mercado, por su doble acción de inhibidor de la bomba de protones y antibacteriano (Fig.1).
Después de numerosos ensayos, los resultados alcanzados permitieron comprobar, desde el punto de vista científico, la posibilidad del uso etnomédico (medicina tradicional practicada por grupos étnicos y pueblos indígenas) de esta planta como antiséptico, cicatrizante y anti-ulcerogénico, que hasta el momento no habían sido evaluados ni reportados por la literatura técnica. El hecho de que su extracto constituye un producto noble, en cuanto a seguridad en la aplicación al hombre y animales, al no tener efectos secundarios, sienta la potencialidad del mangle en el desarrollo futuro de medicamentos.