Propiedades
Siempre será necesario recordar las propiedades del agua; de tal forma que, nos permita manejarla bien en beneficio del camarón. El agua es considerada el “líquido vital”, por ser capaz de sostener la vida del planeta y servir al hombre en sus múltiples requerimientos.
Además, es el líquido que más sustancias disuelve, por eso es llamado “el disolvente universal”, propiedad muy importante para la dinámica de la vida, gracias a su capacidad para formar puentes de hidrógeno, por lo que también pueden disolverse en ella, compuestos contaminantes que la degradan.
En la molécula de agua, el oxígeno posee una electronegatividad superior y atrae con fuerza a los 2 hidrógenos. Al estructurarse la molécula, los hidrógenos se distribuyen de forma asimétrica, convirtiendo el agua en una molécula polar. Al quedar los 2 hidrógenos desprovistos de sus electrones, ellos manifiestan una densidad de carga electropositiva, generando una condición que hace que la molécula de agua sea también dipolar (Fig. 1).
Fig. 1 Di polaridad del agua generada por el hidrógeno.
Los iones de sales, como cloruros, carbonatos y sulfatos, son atraídos por los dipolos del agua, quedando recubiertos por moléculas de agua en forma de iones hidratados.
En el agua se establecen interacciones dipolo-dipolo entre las moléculas, formándose los puentes de hidrógeno (Fig. 2). También estos puentes aparecen en el ADN y en las proteínas de todos los organismos.
Fig. 2 Las moléculas de agua se unen por puentes de hidrógeno.
La acción de compartir electrones entre átomos se conoce como enlace covalente. Para esto, los átomos utilizan en el enlace los electrones de sus capas más externas, formando así la nueva molécula; siendo esto, un proceso dinámico y permanente. Cuando una sustancia reacciona con otra, el número de electrones de cada una cambia, pero conserva intacto el de sus protones y neutrones; por ejemplo, el ácido carbónico se forma en la piscina cuando se unen el CO2 y el H2O (Fig. 3).
Fig. 3 Los átomos del CO2 se unen por los electrones de la última orbita.
Los puentes de hidrógeno mantienen las moléculas de agua fuertemente unidas, formando un líquido casi incompresible; propiedad que le permite funcionar como esqueleto hidrostático en algunos animales acuáticos; por ejemplo, la Artemia salina y los estados de Zoea del camarón, poseen hidroesqueletos (Fig. 4).
Fig. 4 La incompresibilidad del agua mantiene la forma a los cuerpos de la zoea y la artemia.
En una piscina de cultivo de camarón, el agua tiene una gran variedad de sustancias disueltas y su dinámica de disolución – concentración de sustancias buenas y no buenas – cambia constantemente; según como los factores físicos, la temperatura, por ejemplo, incidan sobre ella. Como consecuencia, está expuesta a la sobresaturación, rompiendo su equilibrio y sometiéndose a un proceso de “estresamiento”; lo que afecta a la fotosíntesis de las algas, mediante la siguiente secuencia:
Agua estresada → deshidratación del agua → afectación de la fotosíntesis → disminución de fijación del CO2 → incremento de la concentración de solutos en células deshidratadas → foto inhibición.
Esta foto inhibición conduce a una disminución de la productividad primaria y, consecuentemente, hay pérdida en la calidad del agua. Para cuidarla y mantenerla estable dentro de la piscina, es necesario estar siempre recordando sus propiedades.
